Entiende la etapa del “¡No mamá! ¡Lo hago yo!”
El inicio de una lucha natural por la búsqueda de su autonomía
Una característica que prevalece en los niños de entre 2 y 3 años de edad es querer hacerlo todo y “a su manera”.
¿A qué se debe que prácticamente todos los niños muestren esta actitud? La respuesta es que están en una etapa en la que empiezan a fincar las bases de su autonomía, lo cual es algo natural y absolutamente necesario para su óptimo desarrollo.
Cuando los padres entienden que un niño de esta edad, siente un impulso de poner a prueba sus ideas, tomar sus propias decisiones y actuar según sus preferencias, dejan de etiquetarlo como “rebelde” o “desobediente” y pueden enseñarle a saber qué hacer con sus emociones.
La autonomía significa que un niño puede sentirse libre y capaz de explorar el mundo, pero siempre dentro de los límites de seguridad que los padres establezcan.
Un niño que es capaz de dar sentido a sus planes e ideas, será capaz de realizar por sí mismo aquellas tareas y actividades propias de su edad y tendrá más herramientas para relacionarse de manera sana con su entorno.
Su autonomía le traerá logros y fracasos, pero como intentará superar esos retos, desarrollará confianza en sí mismo, lo cual tendrá un impacto positivo en su autoestima.
La respuesta de un mal manejo de su autonomía, le traerá:
- Búsqueda constante de aprobación de los demás
- Inseguridad
- Dudar de sus propias capacidades
- Dependencia
- Poca iniciativa
- Problemas de aprendizaje
- Dificultad para relacionarse
Xóchitl González, especialista Jejé Kids,
en colaboración con Karla Jiménez y Maribel Solano
“Cuando los padres entienden que un niño siente el impulso de buscar su autonomía, dejan de etiquetarlo como ‘rebelde’ o ‘desobediente’.”
Xóchitl González, especialista Jejé Kids,
en colaboración con Karla Jiménez y Maribel Solano